Dra. Yolanda Moreno
Fue hacia el final de mi carrera de Biología cuando me pico el gusanillo de la microbiología, ese mundo microscópico tan inmenso y desconocido que hasta hoy me sigue sorprendiendo. Nada más terminar la carrera, tuve la oportunidad de desarrollar mi tesis en el departamento de Biotecnología de la UPV gracias a una beca del Ministerio que además me dio la satisfacción de ser premiada como mejor tesis doctoral del 2002 en la UPV. Durante esos años me especialicé en técnicas moleculares para la detección y caracterización de microrganismos, principalmente patógenos, con estancias en centros de referencia como la Technical University of Munich (TUM) o el Instituto Max Planck, donde me especialicé en una de las técnicas con mayor expansión en la biología molecular, FISH (Fluorescent in situ hybridization). Podría decir que fui una de las primeras investigadoras en España que comenzaron a aplicar el FISH para la identificación de microorganismos tanto en agua como alimentos y estaba ansiosa por compartir este conocimiento. Fue entonces cuando inicié una colaboración con el Instituto de ingeniería del Agua Y Medio Ambiente que se interesó por la puesta a punto de esta nueva tecnología para estudios de ecología microbiana en procesos de depuración. A partir de entonces comencé a investigar con mayor profundidad el agua y su relación con los microorganismos, sobre todo su papel como vehículo de trasmisión de patógenos y su importancia en Salud Púbica. Después de un tiempo compaginando mi tarea docente como profesor asociado de Biotecnología con mi trabajo de investigador en el IIAMA, decidí dejar la plaza de profesor y dedicarme por completo a mi pasión, la investigación. Sin embargo, mi tarea docente continua con la formación continua de doctores tanto en programas de doctorado nacionales como el de Biotecnología o Tecnología de Alimentos en la UPV o internacionales como el de Biología la Universidad de Colombia o el Máster Internacional de Tecnología de agua de la Universidad Católica Boliviana.
Aunque mi trayectoria investigadora me ha llevado a publicar más de 60 artículos en revistas internacionales de impacto y a participar en más de 24 proyectos de investigación, mi pasión por la microbiología y el interés por aprender cosas nuevas me hace imposible no buscar nuevos retos o soluciones a cuestiones que aún están por resolver.